La experiencia del proyecto pionero de un mundo virtual será un gran activo para Linden Lab, que quiere adelantar a Meta

Philip Rosedale vuelve a casa. El fundador del mundo virtual Second Life, de Linden Lab, se volverá a incorporar a la plantilla de la empresa que fundó en 1999. Ahora será asesor estratégico. Su objetivo será guiar y asentar a la compañía en el metaverso moderno, el concepto que ya exploró su empresa y en el que Mark Zuckerberg y Meta han tomado la delantera.

Rosedale se marchó de Second Life en 2013 para cofundar High Fidelity, una empresa de realidad virtual especializada en audio espacial. Esta compañía es la que ha comprado Linden Lab tras haber desembolsado una cantidad de dinero indeterminada y haber invertido una serie de patentes. Además, algunos empleados de High Fidelity pasaran al equipo de desarrollo de Linden Lab.

El movimiento de Rosedale busca recortar terreno a Meta y su metaverso, que no acaba de arrancar o, al menos, está lejos de estar consiguiendo los resultados que se esperaban en un principio. De paso, adelantarse a Apple, que también está planeando su desembarco en los mundos virtuales.

Para poder alcanzar el metaverso de Zuckerberg será vital la experiencia de Rosedale, que ya ha lanzado una pequeña pulla a Meta asegurando que «nadie ha estado tan cerca de construir un mundo virtual como Second Life«. En este sentido, el empresario ha apuntado que el proyecto de su empresa será radicalmente diferente al de otras compañías que, según él, «no van a crear una utopía digital única y mágica para todos».

El nuevo asesor de Linden Lab ha indicado que «los mundos virtuales no necesitan ser distopías” y ha puesto como ejemplo lo que ha conseguido Second Life: «Ha logrado crear una experiencia positiva y enriquecedora para sus residentes, con espacio para que se unan millones más, y al mismo tiempo ha construido un negocio próspero basado en suscripción»…

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